Caballé, forever!
Una esplendorosa Sondra Radvanovsky ha ofrecido un recital en la iglesia del Carmen en homenaje a Montserrat Caballé.
La iglesia del Carmen del Castillo de Peralada, un lugar entrañable y que Montserrat Caballé apreció mucho, ha acogido un recital en honor de la gran diva de la lírica.
Sondra Radvanovsky, que debutó en España y en el Festival con un concierto en 2007 al lado de la mezzo-soprano Sonia Ganassi, ha actuado en varias ocasiones en Peralada; en 2011 en un recital en la iglesia, volvió representando la Norma, de Bellini en 2013 y la última vez fue para la gala lírica del 30 aniversario del Festival, en el año 2016. Hoy, Radvanovsky ha protagonizado el homenaje a Montserrat Caballé y el año próximo será la protagonista de Aida, de Verdi, la nueva producción de Peralada. No queda lugar a dudas, que la soprano es el auténtico fetiche del Festival.
Cuando hablamos del Festival Castillo de Peralada, hablamos de Montserrat Caballé. El fiel público del festival sabe perfectamente de qué hablamos. La gran diva, en su primera visita al Castillo, supo ver en el entorno de Peralada un potencial para que nuestro país tuviera un festival lírico. Junto con Carmen Mateu, soñaron juntas el inicio de lo que ha terminado siendo nuestro festival. Su participación y su voz universal fue clave para la proyección internacional del Festival Castell de Peralada y convertirlo en un referente en la Península Ibérica. Hoy, voces como las de Sondra Radvanovsky, hacen posible que el sueño de Montserrat Caballé y Carmen Mateu continúe.
Junto al pianista Anthony Manoli, la soprano canadiense, nacida en Estados Unidos, ha revisado un programa con muchos puntos en común con la soprano catalana. La Iglesia el Carmen ha vivido hoy uno de los momentos más emotivos del verano con un recital-homenaje por parte del festival en la que fue la gran protagonista de sus primeras ediciones.
El programa ha empezado con Amarilli, mia bella de Giulio Caccini, ha continuado con Sento nel core d’Alessandro Scarlatti y O del mio dolce ardor de Cristoph Willibald Cluck. Una primera parte muy intensa en la que también se ha escuchado a Vincenzo Bellini con Per pieta, bell’idol mio, La Ricordanza y Ma rendi pur contento y a Giuseppe Verdi con Non so le tetre immagini, d’Il Corsaro. La primera parte del recital ha terminadoconb Gaetano Donizetti y L’amor suo mi fe’beata, de Roberto Devereux.
Sondra Radvanovsky, que en este recital ha estado brillante como ya tiene acostumbrado a su público de Peralada, ha empezado la segunda parte del programa con Giacchino Rossini y La regata veneziana: 1) Anzoleta avanti la regata 2) Anzoleta co passa la regata 3) Anzoleta dopo la regata. La soprano ha interpretado a continuación Sole e amore E l’uccellino ‘Sola, perduta, abbandonata’ de Manon Lescaut de Giacomo Puccini. El recital ha terminado con Giuseppe Verdi y una magnífica Una macchia, ¡è qui tuttora!, de Machbeth.
La soprano ha estado muy generosa con las propinas con un total de cinco: Lo son l’umile ancella de l’òpera Adriana Lecouvreur, l’aria Casta Diva de Norma, Vissi d’arte de Tosca, Ebben? Ne andró lontana de l’òpera La Wally y ha terminado con Somewhere over the rainbow. El público, entusiasmado con el gran recital ha aplaudo eufóricamente a la soprano, que el próximo año volverá a Peralada para protagonizar la ópera Aida, de Verdi, al lado del tenor Piotr Beczala, la mezzo-soprano Anita Rachvelishvili y el barítono, Carlos Álvarez.
El concierto, ha sido grabado por la emisora Catalunya Música.